(Redactados exclusivamente desde
el punto de vista de un profesional de la arquitectura)
Publicados en www.certicalia.com el 29/1/2016
Publicados en www.certicalia.com el 29/1/2016
1) Visita el barrio del piso a distintas horas del día
De día los fantasmas desaparecen,
pero por la noche, un barrio suele ofrecer su cara verdadera. No te dejes
influir por las modas del momento, ni siquiera por los precios. Un piso de
50.000 euros en el centro de Madrid puede ser un auténtico desastre que te
provoque un chorreo de dinero constante a base de derramas, que lo convierta en
uno de 125.000 € en varios años. Ten claro qué es lo que buscas y no te dejes
seducir por ofertas. Eres tú el que escoge, no el vendedor.
La
Este-Sureste es la mejor durante todas las épocas del año. La Oeste es buena en
invierno, pero en verano sufre de un asoleo demoledor. La Sur también es buena,
si se presta especial atención a los elementos que generen sombra.
Orientaciones como la Noroeste-Norte-Noreste son proclives al gasto energético,
sobre todo en viviendas usadas.
3) Cuando
visites el piso, no solamente utilices la vista, sino el resto de los sentidos
Un olor a humedad delata que algo pasa, tocar las paredes puede desenmascarar
alguna grieta imperceptible u otra mancha que pasaba desapercibida. Escucha en
silencio los ruidos que puedan venir de la calle o de los edificios
colindantes, eso te dará señales sobre el estado del aislamiento. Y, por
supuesto, analiza el estado de todos los elementos del piso, tanto fijos como
de instalaciones, tipo de ventanas, grueso de muros… En un futuro no es
descartable que los compradores de pisos se hagan acompañar por un técnico que
les asesore convenientemente de la conveniencia del inmueble o no.
Estos documentos
suelen estar colgados en formato pdf o interactivos en las páginas web de los
Ayuntamientos. En el caso de que no sea así, hay que pedir cita con el
departamento de Urbanismo o con el arquitecto municipal, y solicitar dicha
información. ¿Por qué? Para averiguar si el edificio está afectado por un
inminente plan urbanístico, cambio de alineación, Plan de Reforma Interior,
etc. No es muy agradable encontrarse con la sorpresa de que tu vivienda recién
adquirida en un plazo de escasos años va a ser expropiada por la apertura de
una avenida. De acuerdo con que el propietario anterior o la agencia debía
haberte avisado, y que han incurrido en dolo, pero no está de más realizar esta
gestión previa o encargarla a alguien experto en la materia que la realice.
Este consejo
vale sobre todo para viviendas de segunda mano. En este caso, es probable te
toparás con el hermetismo de muchos vecinos y del propietario. Cuando visites
el piso, piensa que aunque reluzca a la vista por una espléndida reforma, puede
haber defectos precisamente tapados por el yeso que todavía está húmedo.
Pregunta sin temor si el piso tiene aluminosis. Muchas veces, aunque te digan
que no, los gestos faciales del vendedor delatan la verdad. Visita otros pisos
del edificio pidiéndoselo a los vecinos. Mucho ojo con barrios afectados por la
aluminosis, entérate de si el del piso deseado ha padecido esa plaga. Si es
potencialmente candidato, no temas pedir una cata. Los vendedores quieren
vender, y si realmente quieren cerrar la operación, se harán cargo del coste de
ese análisis de laboratorio.